De visita en la Bombonera, con fútbol, corazón, intensidad y personalidad, Uruguay logró ganarle al Campeón del Mundo con goles de Araújo y Nuñez. El martes ante Bolivia cerrará el 2023.
La selección que dirige Bielsa tuvo un comienzo titubeante, dio la sensación de que le costó acomodarse, de tal manera, que a los dos minutos pudo encontrarse perdiendo ante un centro que cruzó el área y Ottamendi que venía acompañando la jugada, no pudo ligar. Desde ahí y hasta los 10 minutos, se repartieron el balón, con leve supremacía argentina.
En ese momento, un balón largo de Araújo, en un anticipo a Nicolás González, logró conectar con Nuñez, que a velocidad le ganó la posición a Tagliafico, y su remate se fue apenas ancho. Avisaba Uruguay que estaba en la cancha.
Dos intentos posteriores de De La Cruz y Pellistri, con participación excluyente del artíguense Nuñez, para llegar a los 35´con una selección oriental que trabajó, transpiró, e incomodó al equipo de Scaloni, superándola y haciendo que prácticamente no pudiera generar jugadas de ataque, excepto un tiro aislado de Julián Álvarez que se fue desviado.
A los 41´llegó el premio al esfuerzo. Con enorme carácter y tenacidad, Viña peleó una pelota sobre Molina, le ganó con el cuerpo dos veces, le quitó el balón, lo eludió y encajó, - con los ojos bien abiertos - un centro rastrero pasado al segundo palo del arquero Martínez, quien claudicó sin defensa alguna, ante el riverense Ronald Araújo, que llegando con toda la potencia, y con cara interna de pie derecho, la cruzó sobre el pie de apoyo del arquero y anotó un gran gol para poner a Uruguay en ganancia yéndose al vestuario con victoria parcial de 1 a 0. Justa, merecida, lógica y también conmovedora. Superando los roces, empujones, actitudes desleales de De Paul, al que se sumaron otros, incluido el Capitán Messi, tomando del cuello a Olivera. Los uruguayos, fieles a su estilo y su historia no se dejaron llevar por delante y le plantaron cara en el fútbol y personalidad a los dirigidos por Scaloni.
La segunda mitad
La imaginamos con Uruguay esperando y soportando una arremetida inicial, tirándole Scaloni el equipo y camiseta arriba con el público a favor y en su casa.
Sin embargo, Uruguay arrancó el segundo tiempo igual, siendo protagonista, atacando, con desbordes, volantes y laterales tocando y teniendo control del juego, defendiéndose con la pelota, abordando el arco rival, con astucia para herir, dañar, anotar. El reinicio trajo a José Ma. Giménez de zaguero, a Olivera de volante y salió Viña sentido.
Argentina era una suma de voluntades, con vergüenza, con empeño, con Messi apretado por la marca, con todo el equipo presionado, sin poder soportar la intensidad y la superioridad física de la celeste. Vinieron los cambios, ingresó Bentancur de muy buen retorno y aporte por el lesionado Maximiliano Araújo, que se fue llorando, tras una infracción desleal de N° 7 De Paul. Para el árbitro el foul fue del uruguayo.
Scaloni que había mandado a la cancha a De María y Lautaro Martínez por Nicolás González y Mac Allister, siguió metiendo tijera. Se fueron Julián Álvarez, al que no le llegó el balón, fue absorbido por la marca de la zaga compatriota y remató solamente dos veces al arco, también salieron Tagliafico y De Paul, cansado, superado, ofuscado y además alevoso, sucio para enfrentar a rivales que le ganaron todas las divididas. Entraron Lo Celso, Palacios y Acuña.
Por unos minutos Argentina obligó, lo acercaba el árbitro cobrando “mancha” y permitiendo tiros libres de Messi, uno picó en el horizontal. Sucesivos tiros de esquina. Peligro, aparece Rochet atento.
En uno de esos intentos argentinos, el balón va hacia Messi, su aspiración en la jugada, eludir rivales y abrir caminos, pero su ambición muere en la ubicación y el porte de Bentancur que le "roba" el balón de manera simple y efectiva, lo cede a De La Cruz, y el volante mete un pase milimétrico al pique de Darwin Nuñez. El artiguense que le gana como toda la noche a Otamendi, pica con gran velocidad, deja atrás a su marcador, amaga, lo mira dos veces al arquero Martínez y cuando este se juega al achique coloca el balón entre sus piernas y cierra una noche soñada, ¡golazo! 2 a 0 y a cobrar.
Victoria fantástica de Uruguay. Desde lo táctico, la intensidad, la generosidad y solidaridad colectiva para superar en todas las líneas al campeón del mundo cortándole una racha desde que dirige Scaloni, en la que nunca había perdido por Eliminatorias; recibiendo su primera derrota después del título mundial. Desde octubre de 2015 que un equipo no le convertía dos goles a la “albiceleste” jugando de local (Argentina 0-2 Ecuador). Es la 1ª. vez que Uruguay derrota a la Argentina por Clasificatorias y no lo hacía en cancha dentro del partido desde 1987 aquel 9 de julio con el gol de Alzamendi. Después en 2011 durante la Copa América lo eliminó, pero en la tanda de penales.
El árbitro
Mal partido de Roldán. El colombiano tuvo un pésimo arbitraje. Tendencioso, con propensión a cobrar todas las dudosas para Argentina. La jugada del foul de De Paul a Araújo es clara de su aversión contra el equipo uruguayo. Los asistentes tampoco colaboraron. Acercó con tiros libres a la Selección de Scaloni que no precisa de esta “ayuda” para salir airoso de sus contiendas. Lastimoso para el arbitraje sudamericano y un toque de atención para Conmebol que le dio la final de la Libertadores. Con árbitros de este estilo en juegos de alta competencia pueden terminar los partidos en cualquier cosa. Se acordó tarde de las amarillas y arrancó como no podía ser de otra manera con Uruguay.
Síntesis: Con personalidad, fútbol, juego colectivo, defendiendo con la simpleza de recuperar, rotar el balón y tirar pases largos, no pudieron - ni la voluntad y el tesón de los rivales ni las gambetas o tiros libres de Messi - con el orden táctico “Celeste”.
Uruguay ganó en velocidad cada duelo individual sobre los centrales o los laterales. Ugarte, Nuñez, Valverde, De La Cruz, Olivera, fueron esencialmente y con enorme aporte de todo el equipo, una pesadilla para la selección de Scaloni.
Este equipo que dirige Bielsa, ahora nos invita a cambiar el chip de una vez por todas. Ya no somos el equipo que minimizaba las virtudes del rival, para después intentar atacar con el fin de que apareciera alguna pelota salvadora. Defender era lo primero, el asunto era como hacíamos goles, y si nos convertían, - cosa que nos pasaba con frecuencia -, con rachas de partidos que tuvimos, en las que nos llegaron a convertir 11 goles de corrido en tres juegos. Así fueron los años que tuvieron logros y victorias, pero donde nos acostumbramos a perder ante Argentina y Brasil.
Hay un plan de juego, explicado, entendido y ejecutado por los jugadores, que creen y profesan un estilo y un planteamiento a desarrollar que no se conocía de una Selección Uruguaya por estos lugares.
Reporte:
Eliminatorias Sudamericanas para la Copa Mundial de la FIFA 2026. Fecha 5
Jueves 16 de noviembre de 2023
Argentina 0-2 Uruguay
Estadio: La Bombonera
Árbitro: Wilmar Roldán
Asistentes: Alexander Guzmán y John León. Cuarto árbitro: Carlos Bentancur
VAR: John Ospina AVAR: Yadir Acuña (todos de Colombia)
Argentina: E. Martínez; Molina, Romero, Ottamendi, Tagliafico (Acuña); De Paul (Palacios), Fernández, Mac Allister (L. Martínez), Messi; J. Álvarez (Lo Celso) y N. Palacios (Di María).
Uruguay: Sergio Rochet; Ronald Araujo, Sebastián Cáceres, Mathías Olivera, Matías Viña (José Ma. Giménez); Federico Valverde, Manuel Ugarte, Nicolás de la Cruz; Facundo Pellistri (Agustín Canobbio), Darwin Núñez y Maximiliano Araújo (Rodrigo Bentancur).
Goles: Ronald Araujo (41') y Darwin Núñez (87')
Ernesto Ortiz
C.P.D.U.
