
La forma de enseñar en la Universidad de la República (Udelar) varió en los últimos años producto de la pandemia del COVID-19. Ayudó a descubrir nuevas maneras de dictar las clases, permitiendo una renovación en el ámbito digital en la institución. Juan Cristina, prorrector de Enseñanza y docente de la Udelar, y Luciano Acquistapace, integrante del grupo de estudiantes Universidad para todos dialogaron con Portal APU.uy sobre el tema.
El 13 de marzo del 2020 la Udelar comunicó que las clases se verían suspendidas hasta el 21 de marzo “con la intención de mitigar la expansión de la transmisión del Coronavirus COVID-19”. A raíz de este hecho las clases comenzaron a dictarse a través de la modalidad virtual. Siendo un momento de adaptación por parte de la universidad, pero necesaria para la reanudación del semestre.
Juan Cristina, prorrector de Enseñanza de la Udelar en declaraciones a Portal APU.uy manifestó que la pandemia ayudó a acelerar procesos que se venían discutiendo en las universidades, sobre todo el papel de “la virtualidad en la educación universitaria”.
Sin embargo, no se deja de lado el dictado de las clases presenciales, porque “hoy en una universidad moderna la virtualidad ocupa su lugar, pero la virtualidad no es toda la educación universitaria”. La Udelar no es “una institución de instrucción, sino que es “una institución educativa y donde, el docente es insustituible en la relación con el estudiante”, manifestó Cristina.
“Si nos creemos que la virtualidad es todo, dar una clase híbrida [alumnos de forma presencial y virtual al mismo tiempo] no puede ser lo mismo que dar una clase presencial, porque pedagógicamente el docente se tiene que preparar de otra manera, porque si no, es alguien que se está filmando con una cámara”, agregó el docente.
Aprendizajes
Una de las enseñanzas que dejó la virtualidad es evitar las clases teóricas presenciales con grandes cantidades de alumnos. Cristina asegura que, en la actualidad, en las materias de los primeros años de las carreras, “no tiene sentido que un docente dicte una clase para 600 estudiantes”, ya que no se quiere volver a repetir el dictado de clases con alumnos “colgados de las ventanas del lado de afuera”, como ocurría en la Facultad de Derecho (FDER). En cambio, las prácticas sí tienen que ser presenciales, ya que los docentes les transmiten a los alumnos sus experiencias, conocimientos y sobre la ética profesional.
El prorrector indicó que el rol del docente en el mundo, para generar una formación universitaria en los alumnos tendría que cambiar. El dictado de las clases donde se escuchaba y sacaba apuntes por parte de los estudiantes se tendría que modificar por un profesor que venga “a discutir los problemas, a plantear situaciones y proyectos”, es decir, una educación por competencias. Una modificación que desde antes de la pandemia se viene discutiendo en las universidades de Europa y Estados Unidos.
Además, una nueva opción de dictado de clases que trajo la virtualidad, fueron las clases híbridas. Ayuda a los alumnos que no pueden asistir a clases, pero “es mucho más caro que los otros sistemas [Plataformas de videollamadas]”, ya que se precisa “más tecnologías y presupuesto” para aplicarlo, indicó.
Una postura diferente
Desde 2021 existe un grupo de estudiantes de la Udelar llamado Universidad para todos, ellos buscan que la modalidad virtual se tome como una opción para quienes no pueden acceder de forma presencial a la universidad, ya sea por trabajo, familia o tiempo. El grupo se formó por cinco estudiantes de la FDER y con el tiempo se unieron estudiantes de otras facultades para luchar por el mismo objetivo: la virtualidad como opción de estudio.
Si se comparan los rendimientos de los estudiantes del primer semestre de la pandemia, con el primer semestre del año anterior, los “rendimientos son similares”.
Luciano Acquistapace, integrante de dicho grupo, dialogó con el Portal APU.uy y manifestó que muchos estudiantes no pueden asistir a Montevideo para tomar las clases presenciales. “Tenemos muchos casos privados de libertad, madres solteras, personas con discapacidades, estudiantes que viven en Montevideo y que se le hace difícil atravesar toda la ciudad para ir a la facultad”, además de los alumnos del interior. Sin embargo, el prorrector fue consultado por el Portal APU.uy sobre el tema y expresó que, si se comparan los rendimientos de los estudiantes del primer semestre de la pandemia, con el primer semestre del año anterior, los “rendimientos son similares”.
Ellos entienden la postura de la Udelar de volver a una mayor presencialidad, pero manifiestan que muchos estudiantes quedarían por fuera si se vuelve a una presencialidad total. Aunque, tienen en cuenta que en algunas carreras se dificulta la modalidad virtual, ya que se precisa la presencialidad para las prácticas, por ejemplo, en la carrera de medicina de la Facultad de Medicina (FMED).
En 2022 a través de una campaña juntaron más de 30 mil firmas en apoyo a esta iniciativa y Acquistapace indicó que se presentaron las firmas al Consejo de la Facultad de Derecho, pero les dijeron que “no tenía ningún valor para ellos”. Sin embargo, consiguieron que se implemente un plan piloto en la FDER de clases virtuales y el mismo continúa aplicándose en el 2023. Por este motivo, todavía no se tienen los resultados del plan, manifestó el prorrector.

