Octubre fue el mes de la sensibilización contra el cáncer de mama, por lo cual nos es oportuno  hablar sobre una herramienta importante para la autoestima, y evitar lo traumático que es para la mujer y el hombre perder el pelo por la quimioterapia.
Son dos jóvenes de San José de Mayo. “El cáncer nos tocó cerca, yo tuve en el 2019 y fue traumático la pérdida de cabello. Mi amiga Evangelina (Pirez) me acompañó durante toda la enfermedad, y decidimos llevar adelante una adaptación de la terapia de frío industrializada en otros países”, que evita la caída del cabello.

En base a la experiencia vista en Argentina, en forma casera, comenzamos a crear cascos con bolsas de gel. Los unimos con cintas adhesivas e hicimos correr la voz. La respuesta fue impresionante, nos sorprendió, y comenzamos a fabricarlos.
Mediante beneficios, rifas, colaboraciones, empezaron a solventar sus costos, porque los entregan gratis. Dan excelentes resultados: no se cae el cabello durante la quimio, así surgió “Quimio con Pelo Uruguay”.

Son dos jóvenes que estudian, trabajan y dejan un espacio de su tiempo “desde hace tres años para fabricar los cascos. Tenemos unos 500 distribuidos, totalmente gratis, en todo el país. La mayor parte están en Montevideo”, indicó Camila con una enorme humildad durante la conversación con el portal Apu.uy
Indicó que “los cascos deben ser usados desde el comienzo de la primera quimio para que dé resultado. Que ustedes nos hagan esta nota está buenísimo para llegar a más gente, porque a veces se enteran cuando van en la segunda quimioterapia, y ya no es efectivo el casco”.
Ambas jóvenes están permanentemente en contacto con mujeres y hombres que están en proceso de quimio, y han generado grupos de usuarios, para que coordinen el pasaje de los cascos de unos a otros, y se den ánimo durante la enfermedad.

Para cada casco utilizan cinco bolsas de gel “marca body care en tamaños 2007 y 2005. Es la única marca que hasta el momento hay en nuestro país y sirve para este tipo de cascos, ya que ese gel no queda hecho hielo luego de congelarse y por lo tanto se amolda bien a cada rincón de la cabeza”.
Los cascos fríos “funcionan congelando el cuero cabelludo, dejándolo a menos de 19° aproximadamente, de esta manera la medicación de la quimio no llega al folículo piloso del pelo”, y evita su caída. Para ponerse el casco no hay que recogerse el cabello sino lograr que el frío llegue al cuero cabelludo, es todo.

Para utilizar este sistema contra la caída del cabello, se debe contar con la aprobación del oncólogo, y se usan “sólo para tumores sólidos”. 

Cada paciente concurre a la quimio con una conservadora llevando el número de cascos que necesita, porque deben cambiarse cada media hora, usando el primero media hora antes de la quimio y hasta una hora después de la misma. “Más o menos son entre 8 a 12 cascos que necesita cada paciente”.
Tanto Evangelina como Camila en Facebook e Instagram (“Quimio con Pelo Uruguay”) dan sus números de celular personales para que la gente se contacte mediante mensaje de WhatsApp. “No recibimos llamadas directas porque son muchísimas. Nosotras además de estudiar, trabajar, y dedicarnos a hacer cascos, tenemos los celulares  para atender las llamadas de nuestros contactos personales, no tenemos celulares aparte. Mi celular para enviar mensaje de WhatsApp es 099 344 818 y el de Evangelina es  098 871 803.

El portal Apu.uy es testigo que por llamada no atienden, recién cuando les enviamos un Whatsapp  nos contestaron al indicarles que se trataba de una entrevista.
Para cerrar, damos el número de cuenta de “Quimio con Pelo Uruguay para quienes deseen colaborar para la compra de las bolsitas de gel: cuenta BROU caja de ahorro en pesos 110090215-00001. También pueden aportar bolsitas o contribuir solicitándoles número de la nueva rifa que están por sacar para poder fabricar más cascos, porque “queremos tener muchos más disponibles, además por el uso se rompen”, dijo Camila.