
El animal cruza con Pitbull, llamado “Toto”, quedó desde octubre de 2019 a la espera de que alguien lo adoptara. No sucedió. Está en el patio de la casa que era utilizada por los comisarios de turno en Nueva Palmira, departamento de Colonia, y que la comisión de apoyo policial la reparó y adaptó para “oficina de la mujer”.
Se transformó en una mascota juguetona, bien alimentada y se le nota el paso de los años. Cuando ve a los miembros de la comisión o cualquier otra persona, “Toto” salta de alegría, así lo pudo ver el Portal APU.uy cuando fue invitado a recorrer la nueva sede en defensa de las mujeres víctimas de violencia.
El perro tiene una historia particular, fue dejado en la calle por quienes comenzaron a criarlo, y ese deambular lo llenó de vicios, como morder las ruedas de los autos, y pelear con sus pares, causando incluso la muerte de perros más pequeños, uno de los casos fue durante la fiesta de la primavera de Nueva Palmira en 2019. En esa ocasión le arrebató a una mujer la mascota que tenía en sus brazos e hirió de tal manera que a los días el animal falleció, causando gran dolor a la familia que había venido de Carmelo a disfrutar de la fiesta estudiantil. Días después, peleó con otro perro, un cimarrón, según dijeron, y la dueña para salvar a su mascota tomó un cuchillo y apuñaló reiteradas veces a “Toto” generándole cortes en su cuerpo. Intervino la policía y Toto debió ser llevado a una veterinaria donde fue curado, de acuerdo al Instituto de Bienestar Animal (Inba).
Fue trasladado a la Seccional Policial 4ta. para que alguien lo adoptara, no apareció nadie, salvo el comerciante Víctor Fraga a llevarle de comer.
El saliente Jefe de Policía de Colonia, Jhonny Diego, tras oficializar la comisión de apoyo policial (mediados de 2022) señaló que debía sacarse al perro de la seccional. La respuesta fue el silencio de todos los presentes en la vereda de la Seccional de Palmira, comisión de apoyo y personal policial, eso dejó en evidencia que el animal se había ganado el afecto de muchos.
Debe tener unos 8 años, de los cuales la mitad los ha pasado en el predio de la casa policial de la Seccional 4ta de Nueva Palmira. “Toto” no transitó más la calle, está en la Seccional como si estuviera con “cadena perpetua”, pero conoció lo que es el afecto y se transformó en un animal muy amigable.
La veterinaria Daniela Gubba señaló al Portal APU.uy que el perro tenía un comportamiento agresivo por la violencia que había recibido, el estado de abandono y el hambre.