15 de Noviembre del 2025
Nancy Banchero
Análisis de Eduardo Bottinelli, FACTUM
“La oposición busca erosionar al gobierno y manejar la agenda”
Mag. en Sociología Eduardo Bottinelli
Sociólogo Eduardo Bottinelli
Foto de sus redes

El magister en sociología y director de la consultora Factum analiza en diálogo con el Portal.APU.uy la estrategia de confrontación de la oposición, las limitaciones del gobierno de Yamandú Orsi y los factores externos que condicionan la gestión económica y política del país.

–¿La oposición se ha embarcado en trabar al gobierno “haciendo caer” jerarcas?

–Claramente tomó una línea dura de enfrentamiento casi desde el arranque del gobierno. De alguna forma está la idea de hacer caer figuras, lo que puede enmarcarse dentro de una política orientada a provocar desgaste en el actual gobierno, un desgaste prematuro. También busca manejar la agenda y posicionar temas. El caso del director de ASSE, Álvaro Danza, por ejemplo, hace meses que está en discusión permanente. Y eso ocurre pese a que no es un hombre de larga trayectoria política ni una de las figuras más destacadas desde el punto de vista del poder. Sin embargo, con ese tipo de temas se busca erosionar al gobierno.

–La oposición reclama inversiones que, cuando gobernó, no hizo, por ejemplo, en enseñanza, salud o seguridad.

–Cada vez que alguien pasa a ser oposición le reclama al nuevo gobierno lo que no hizo cuando le tocó gobernar, y así sucesivamente. El Frente Amplio también lo hizo cuando fue oposición. Es algo bastante recurrente. –¿Quedó el país muy endeudado o el actual gobierno no tiene suficiente fuerza o credibilidad para generar los cambios que esperaban muchos de sus votantes? –Diría que se dan ambas cosas. Por un lado, ha ido calando el discurso de que la situación heredada es peor de la imaginada o de lo que se preveía, lo que implica restricciones presupuestales y limita lo que se puede hacer. Al mismo tiempo, aparece la percepción de que el gobierno no viene con la fuerza que parte de sus votantes esperaba. Por un lado, está la “herencia” económica, y por otro, una exigencia de mayor dinamismo.

–Quedan cuatro años y medio del gobierno de Yamandú Orsi. ¿Tiene espacio para concretar los cambios que prometió?

–Claramente hay factores internos y externos. Las condiciones de crecimiento basadas en inversiones externas dependen tanto de lo que Uruguay ofrezca y de las oportunidades que genere, como del contexto internacional. Lo mismo ocurre con las exportaciones, porque dependen de los precios a los que Uruguay puede vender sus productos, sean materias primas o manufacturas —cada vez menos—, y están muy vinculados a la situación global.

Es decir, depende mucho de factores externos en un mundo muy complicado, como las tensiones en la Unión Europea, Estados Unidos, China, India o el bloque de los BRICS. Todo eso influye. Es difícil lograr que la gente se sienta conforme porque los cambios no son inmediatos. Que el gobierno adopte determinadas medidas no significa que la población las perciba de forma inmediata. Es un proceso de construcción; por ejemplo, si sube el salario real, eso no implica que apenas se cobre ya cambie la vida de las personas. Se nota con el paso del tiempo.