
Citando los valores de Liber Seregni, el intendente electo enfatizó en las bases que guiarán su gestión y su vínculo con los municipios.
Mario Bergara, doctor en economía y principal favorito del Frente Amplio para la intendencia de Montevideo, resultó ganador con el 48.9% de los votos, según el escrutinio de la Corte Electoral.
“¡Donde no hay lío, que el Frente Amplió va a seguir gobernando Montevideo!” con esta frase Bergara inició su primer discurso como Intendente de Montevideo ante una multitud eufórica a la que agradeció por el desarrollo de la jornada democrática e instó a sentir “felicidad y emoción por el buen ejemplo del pueblo a manifestarse”.
Los saludos y agradecimientos se extendieron a toda la ciudadanía, grupos y sectores del FA, y a toda la militancia congregada en la sede del partido. Agradeció también a sus hijos y a los demás candidatos electos, con los que afirmó trabajará “con diálogo, con escucha y con participación”.
Valores Seregnistas
El candidato electo llamó a estar atentos a los pedidos de la ciudadanía, quienes manifiestan sus preocupaciones ante las carencias que presenta la ciudad. “Van a ser la prioridad del futuro gobierno departamental. Mucho hay que sostener y mejorar. Estamos preparados”.
En su discurso se evidenciaron los valores inspirados en el desaparecido líder fenteamplista Liber Seregni, como pilares fundamentales para la gestión. Bergara dijo: “Vamos a gobernar con diálogo, escucha y participación. Con mano firme, pero con negociación. Tener en el horizonte la solución y la mejora en el bienestar, en igualdad y en derechos para la ciudadanía”.
Exhortó a ser éticos y transparentes con la rendición de cuentas, y a “tener a la gente en el centro, a los que más necesitan en primer lugar”. Añadió la importancia que tienen para la ciudad las anteriores gestiones: “Tabaré (Vazquez), Mariano (Arana), Ricardo (Ehrlich), Ana (Olivera), Daniel (Martinez), Carolina (Cosse). Vamos a continuar su tarea con los valores que se han tenido en estos 35 años”.
Entre aplausos se anunciaba la despedida con una última petición: “Debemos hacer de Montevideo, refugio de tantas personas buscando un futuro. Compatriotas del interior profundo y ahora con nuestros hermanos de América Latina, buscando ese refugio que los haga vivir mejor. Vamos (a) hacer el nuevo Montevideo juntos, juntas. Gracias, Gracias, Gracias”.