A los dos minutos, una mala salida de la defensa aurinegra, y un errado control de Ramos derivó en un centro al área de Peñarol que nadie atinó a despejar y con una intención de Terans, de hacer algo parecido a una chilena, terminó en un balón llovido dirigido al arco, que Dawson haciendo vista panorámica de como caía detrás suyo el balón, lo tuvo que ir a buscar adentro para arrancar el partido perdiendo 1-0.

Ese gol tan impensado como ilógico, hizo que a Peñarol, todo se le hiciera cuesta arriba. Gargano, intentó siempre, pero fue superado numéricamente por las dos líneas de cuatro que planteó el rival. Trindade quedó desacomodado, y tardó en recuperse, por la incidencia en la que el aurinegro tomo el gol.

Sin embargo, los intentos de Peñarol por llegar al arco de Santos, comenzaron a influir por algún apuro del equipo brasileño, en los despejes que generaron segundos balones. En uno de esos intentos, el goleador de la sudamericana, Agustín Álvarez Martínez, luego de un envío de Torres, en acción personal, con rebote incluido, logró empatar.

A los 24, con el 1-1 se vieron los mejores minutos de Peñarol. Los últimos 20 de del primer tiempo dieron la sensación que se llevaba por delante a su rival. Llegó por los costados, por Torres y Canobbio, con un sustancial incremento de la labor de Trindade y Gargano. Obligó a tiros de esquina, presionó bien y paso a dominar hasta el final.

El segundo tiempo se presentaba con expectativas de que el aurinegro siguiera en el tono con el que había cerrado la 1ª. mitad. De entrada la sustitución de Ramos por Valentín Rodríguez.

La esperanza se derrumbó con el paso de los minutos. At. Paranaense tomó el control, armó una muralla de hombres, impidiendo que avanzara el rival. Si algún jugador del aurinegro se le iba cortaba con faltas como en el primer tiempo. Aplicó audacia y mañas.

Peñarol terminó fastidiándose con el trámite, hubo amarillas, se desgastaron sus volantes centrales. El entrenador ensayó cambios que sorprendieron. Quitó del campo a los dos volantes que aún cansados o amonestados siempre llevan al equipo arriba. Trindade y Gargano. La nueva adquisición Gaitán, después de más de 8 meses sin jugar, fue enviado al campo. Laquintana que es rápido y encarador, ingresó cuando faltaban 8 minutos.

En cambio el equipo de Paranaense hizo cambios que le rindieron tanto que encontró en los pies de Pedro Rocha la victoria, después de un rechazo deficitario defensivo, el volante brasileño mandó un zapatazo cruzado, que picó antes de entrar, y que Dawson miró como se metía en su arco.

Peñarol entró en una confusión tan peligrosa en los minutos finales que pudieron haberle costado otro gol.

Llegó al final con las manos vacías, sin rescatar siquiera un empate.

Tendrá que ir a buscar un milagro a Curitiba, en una cancha de césped artificial, con la tranquilidad que le da al triunfador de esta noche, saber que puede hasta perder por 1-0 y estará en la final.

Es cierto que nadie perdió antes de jugar, pero la Sudamericana que se suponía podría ser un sueño lograrla, estimaría que será eso, un sueño.

Detalles:

Copa Sudamericana

Partido ida Semifinal

Estadio: Campeón del Siglo

Árbitros: Diego Haro, Jonny Bossio, Michael Orué. 4° ábitro Kevin Ortega todos de Perú.

Árbitros VAR: Víctor Hugo Carrillo (Perú), Jhon Ospina y Alexander Guzmán (Colombia)

Peñarol (1): Kevin Dawson, Giovanni González, Carlos Rodríguez, Gary Kagelmacher, Juan Manuel Ramos (46´ Valentín Rodríguez), Jesús Trindade (60´ Damián Musto), Walter Gargano (68´ Nicolás Gaitán), Agustín Canobbio (83´ Ignacio Laquintana), Pablo Ceppelini (83´Ariel Nahuelpan), Facundo Torres, Agustín Álvarez Martínez.

DT: Mauricio Larriera

Atlético Paranaense (2): Santos, José Ivaldo, Thiago Heleno, Pedro Enrique, Marcinho (80´ Christian Alves), Erick, Richard (57´ Léo Cittadini), Abner Vinicius (63´ Nicolás Vichiatto), Nikao, Guilherme Bissoli (80´ Renato Kayzer), David Terans (63´ Pedro Rocha).

DT: Bruno Lazaroni

Goles: 2´ D. Terans (AP), 22´ A. Álvarez Martínez (P), 75´ P. Rocha (AP)