Como consecuencia del aumento de la pobreza, cada día más habitantes luchan para poder llevar una porción de comida en sus estómagos, es por medio de la solidaridad que el movimiento de las ollas populares se hizo oír en nuestro país, su función es proveer de comida a las personas que no la tienen y actualmente son 120.000 las porciones de comidas entregadas semanalmente en todo el territorio uruguayo.

Muchas organizaciones como Solidaridad Uy (Universidad de la República en coordinación con profesores, alumnos y egresados), Manos a la Olla, la Intersocial Feminista entre otras, conformaron un sistema muy útil en el cual las tareas de obtención, distribución, relacionamiento, prensa y propaganda se vieron organizadas y funcionando correctamente. En lo que es apoyos estatales, la intendenta Carolina Cosse llevó a cabo por la Intendencia el plan ABC que provee de transporte e insumos a las ollas. Actualmente el Ministerio de Desarrollo Social implementa un plan de apoyo a través de la ong Uruguay Adelante, organización creada en abril del año pasado que en su misión se encuentra capacitar a las personas para trabajar además de donar y transportar insumos.

Sin embargo, varias discrepancias surgieron a través de esta medida adoptada por el reciente ex ministro Pablo Bartol. Según la vocera de la Coordinadora de Ollas Populares, Paola Beltran entiende que como el órgano más completo y constituido, la Coordinadora no fue tomada en cuenta para invertir la gran cantidad de dinero del Fondo Coronavirus, finalmente el monto se deposita en el sector privado. En definitiva, la relación con el Mides es catalogada según Beltran por “lo justo y necesario”.

Entre sus dificultades la que se encuentra más activa son sus diferencias de modalidades y entre las personas que conforman el sector de las ollas surgen opiniones contradictorias, generando así dos bandos. Sin embargo, aunque ambas organizaciones apuntan a lo mismo, Uruguay Adelante tiene un sistema con métodos organizados, aprobados y financiados por el mides y la Coordinadora de Ollas Populares, tiene la cooperación y solidaridad de todas las ollas, con un  funcionamiento comunitario que incluye a otras organizaciones sociales y estudiantiles, de aquí la pregunta “¿Por qué se eligió a una organización privada para tercerizar lo invertido del Fondo Coronavirus?”. Esta pregunta también es el comienzo de muchas discusiones de sesgo político que hoy toman forma en redes sociales como por ejemplo Facebook y Twitter. Más allá de las diferencias en sus modalidades en varias oportunidades ambas organizaciones trabajan en equipo y tienen en palabras del cofundador de Uruguay Adelante, Santiago Perez “un vínculo fluido” por el bien común, alimentar a quienes no poseen comida.