
Su nombre completo era María Bernabela Herrera Sanguinetti, pero todos la conocíamos como Belela. Si en la vida tuvo algún privilegio lo utilizó siempre para el bien de los demás, para "tratar de mitigar" el dolor de otras personas.
Hace poco más de dos años desde el Portal APU.uy lanzamos el ciclo "Valores" en el que entrevistamos a diversas mujeres que fueron parte fundamental en la defensa de los Derechos Humanos de nuestro país.
En el caso de Belela la entrevista fue en su domicilio donde nos recibió con su proverbial calidez de fina anfitriona y la modestia cristiana que también la caracterizaron a lo largo de su vida.
Este 17 de mayo, con 98 años y escasos tres días de una nueva Marcha del Silencio, se apagó su voz cálida, entrañable y tierna.
En 1973 fue funcionaria del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Argentina, México, España, Perú, Brasil, Chile y en otras naciones América Central y del Caribe. Fue subdirectora de la División de Derechos Humanos en una misión de la ONU en El Salvador. Trabajó como observadora de Derechos Humanos en Haití y en las elecciones de Sudáfrica.
Luego de restaurada la democracia en nuestro país ejerció la Presidencia de la Comisión de Asuntos y Relaciones Internacionales del Frente Amplio (CARIFA).
Entre 1987 y 1989 integró la "Comisión Nacional Pro Referéndum", constituida para intentar revocar la "Ley de Caducidad de la Pretensión Punitiva del Estado", una legislación que impedía juzgar a los responsables de los crímenes cometidos durante la dictadura cívico-militar entre1973 y1985.
También fue Directora de Cooperación y Relaciones Internacionales en la Intendencia de Montevideo entre 1995 y 2005.
Ese año, el primero de marzo de 2005, el presidente Tabaré Vázquez la nombró Vicecanciller del Uruguay secundando al Canciller Reinaldo Gargano.
“… ha dedicado su vida a mitigar el dolor de los seres humanos víctimas del actual estado actual del mundo terrorista…”
Entre los múltiples reconocimientos que recibió en vida está la declaración de Ciudadana Ilustre de la ciudad de Montevideo, que recibió el 8 de marzo de 2012, en ocasión del Día Internacional de la Mujer.
Previamente, en 2011, la embajada argentina en Uruguay, en nombre del gobierno de el país vecino, condecoró a Belela Herrera con la Orden de Mayo al Mérito en grado de Gran Cruz, por su “pelea ardiente a favor de los derechos humanos”.
En la entrevista que otorgó a este Portal surge, claramente, que más allá de esos merecidos homenajes, los motivos que la impulsaban era otros, muy superiores a cualquier condecoración, y estaban relacionados con ver que algunas personas podían acceder a sus más elementales derechos.
Una foto que colgaba en las paredes de su hogar lo expresaba con singular claridad: “A Belela, que ha dedicado su vida a mitigar el dolor de los seres humanos víctimas del actual estado actual del mundo terrorista que nos ha tocado en suerte vivir. ¡Gracias Belela!"
