09 de Enero del 2023
Victor Manuel Rodríguez
Noticia en desarrollo
Repudio internacional ante ataques a la democracia y a la decisión popular en Brasil
Lula llega a Brasilia tras los ataques a los poderes públicos
Foto: Equipo de gobierno de Lula

Exactamente una semana después que el presidente Lula Da Silva iniciara su tercer mandato frente al gobierno de Brasil, este domingo 8 de enero manifestantes asediaron, invadieron, vandalizaron y hurtaron armas y documentos de oficinas de los edificios de gobierno en Brasilia.

Los hechos

Un número aún no definido de manifestantes que reivindican una intervención militar desde antes de la investidura de Lula da Silva como presidente, asediaron, invadieron y vandalizaron edificios gubernamentales del Poder Judicial, del Poder Legislativo y del Ejecutivo en Brasilia, en un hecho que fue ampliamente repudiado nacional, regional e internacionalmente.

Desde hace semanas, grupos de simpatizantes del ex presidente Jair Bolsonaro se mantenían acampados frente a cuarteles militares de distintas ciudades exigiendo que las Fuerzas Armadas adoptaran una posición golpista e intervinieran en la vida democrática brasileña, desconociendo así el pronunciamiento de las urnas.

Desde el pasado viernes y también durante el pasado sábado, cerca de 150 ómnibus con manifestantes de distintos puntos del país arribaron a Brasilia. 

Se pudo apreciar como columnas de manifestantes se desplazaban por las calles y avenidas de la capital siendo escoltadas por fuerzas policiales y una vez en lo que se conoce como la Plaza de los Tres Poderes un número aún indeterminado de manifestantes comenzaron a ingresar, vandalizar e incluso sustraer armas y documentos de las oficinas gubernamentales.

Bajo la consigna de "vamos a hacer una limpieza general" hombres y mujeres envueltos en la bandera de Brasil y muchos de ellos vestidos con la tradicional camiseta amarilla incendiaron vehículos policiales, agredieron a efectivos de seguridad que intentaban restablecer el orden y literalmente destrozaron ventanales, mobiliario, equipos tecnológicos, obras de arte, entre otros daños que se comenzaron a relevar en la noche misma de este domingo 8 de enero.

El Ministro en jefe de la Secretaría de Comunicación Social de la presidencia de Brasil (SECOM), Paulo Pimenta, junto a Valdir Damus, ex diputado federal mostraron evidencia de que fueron sustraídas armas letales y no letales, así como municiones de la sala seguridad del Planalto.

 

Roban armas y municiones de Brasilia

 

Las consecuencias

Mientras aún se registraban enfrentamientos en los edificios de los tres principales poderes brasileños, el gobernador de Brasilia Ibaneis Rocha cesó de su cargo al secretario de Seguridad de Brasilia, Anderson Torres (ex Ministro de Bolsonaro).

El gobernador Rocha llegó incluso a pedir disculpas públicamente en rueda de prensa al presidente Lula da Silva por lo que consideró "fallas en la seguridad", pero sus disculpas no fueron suficientes para la justicia, ya que minutos pasada la medianoche Alexandre de Moraes, Ministro do Supremo Tribunal Federal dictaminó la separación del cargo por 90 días del gobernador Ibaneis Rocha.

De Moraes fue enfático en señalar además que "los despreciables ataques terroristas a la democracia y a las instituciones republicanas serán responsabilizados, así como los financiadores, instigadores, anteriores y actuales agentes públicos que continúan en ilícita conducta de los actos antidemocráticos. El Poder Judicial no le fallará al Brasil"

Un poco más temprano, también rueda de prensa el Ministro de Justicia Flavio Dino calificó de "terrorismo y golpismo" a los ataques de este domingo en Brasilia; al tiempo que aseguró que "hay preferencias ideológicas en las instituciones, interfiriendo en las acciones de los deberes funcionales" en alusión a las actitudes de elementos policiales, militares y de distintos niveles de gobierno que se han mostrado abiertamente simpatizantes del ex presidente Bolsonaro.

Tras el ataque a edificios del gobierno en Brasilia senadores, con Renan Calheiros al frente analizan la instalación de una Comisión Parlamentaria Investigadora para establecer responsabilidades de los hechos de este domingo.

Previamente, el presidente Lula da Silva desde el estado de Sao Paulo; donde se encontraba atendiendo una emergencia por fuertes lluvias, afirmó en diálogo con la prensa que "los manifestantes de extrema derecha que irrumpieron en el Congreso serán encontrados y castigados".

Para recomponer la seguridad el Presidente firmó un decreto de intervención federal en Brasilia hasta el 31 de enero, estrictamente relacionada con la seguridad pública colocando como interventor encargado a Ricardo García Capelli, quien le responderá directamente al presidente

Lula incluso hizo hincapié en visitar personalmente los edificios atacados para constatar en primera persona lo sucedido, lo que efectivamente se concretó ya entrada la noche y luego que las fuerzas de seguridad retomaran el control de las instalaciones.

La prensa agredida

En este contexto de violencia, varios periodistas y equipos de prensa fueron agredidos por los manifestantes que pedían intervención militar. Por lo menos 5 periodistas fueron agredidos según organizaciones de prensa brasileñas, sumándose a una larga lista de agresiones vividas por la prensa desde el inicio de las protestas aún en 2022. 

El periodista de El Tiempo de Belo Horizonte, Pedro Nascimento relató en sus redes sociales que "hoy nuestro equipo, así como otros colegas de la prensa, fueron cobardemente agredidos cuando daban cobertura a la retirada de los campamentos de los manifestantes que se encontraban a las puertas del cuartel del ejército en la Av. Gabaglia, en Belo Horizonte"

Las repercusiones

A nivel interno de Brasil, así como a nivel regional e internacional las voces de repudio no se hicieron esperar y, solidarios con el pueblo, la democracia y el gobierno de Brasil se manifestaron líderes políticos de casi la totalidad del espectro brasileño; incluyendo una nota de repudio hecha pública por parte del Fórum Nacional de Gobernadores.

carta de gobernadores

 

La Cancillería uruguaya expresó su "condena" frente a "los episodios de violencia contra las instituciones en Brasil y hace un llamado a respetar el Estado de derecho, la democracia y a su gobierno"

De igual manera gobiernos y gobernantes de distintos países de sur, centro y norte américa, Europa, África y Asia se solidarizaron con el gobierno del presidente Lula da Silva y condenaron los actos de violencia antidemocráticos vividos este domingo en Brasilia.

Las reacciones 

Diversas organizaciones políticas, sociales, sindicales y estudiantiles, entre otras; se movilizaron rápidamente para ofrecer una respuesta en defensa de la democracia. Es así que para este lunes 9 de enero múltiples manifestaciones de apoyo se realizarán en diversas capitales, ciudades y estados a lo largo y ancho del Brasil bajo la consigna "en defensa de la democracia"

El Foro de las Centrales Sindicales, el Frente Brasil Popular, el Frente Pueblo sin Miedo, la Coalición Negra por Derechos, así como la Convergencia Negra emitieron un comunicado orientando "a todas las organizaciones sindicales y populares, así como a toda la militancia social del campo democrático y progresista a manifestarse en las calles de todo el país al final de la tarde de este lunes 9 de enero en defensa de la democracia, las instituciones y de la soberanía del voto popular"

De igual forma instaron a "consolidar un acto político a realizarse en Brasilia este miércoles 11 de enero colocando el foco en la defensa de la democracia y el repudio a los ataques a las instituciones de la República practicadas por fascistas este domingo"